LA CALIDEZ DEL SOL

Hacía tiempo que no salia al jardín a tomar el sol.

Ha sido estupendo sentir la calidez del sol sobre mi piel.
Una mezcla de protector solar, pinos y el incipiente olor a quemado de alguna barbacoa embriaga el ambiente.
Me hace compañía el libro que me prestó un buen amigo y que me lleva a estar en las ruinas de cientos de ciudades precolombinas.
Si cierro los ojos puedo sentir como mis piernas y mis brazos trepan por las empinadas escaleras de piedra de una antigua pirámide azteca y como el sol inunda con sus rayos mi rostro, mis hombros, mi escote y me lleno de energía.

Una suave brisa despeina mi flequillo, brisa cumbrera  del Machupichu que me refresca como refrescó a antiguas civilizaciones que también adoraban al sol , al viento y a las estrellas.

Si entreabro los ojos, puedo ver cómo el sol juega a atravesar las ramas de un enorme pino, un cerezo y una acacia....

Tengo sed, y bebo agua con avidez, mojo mis manos con agua dulce...¿cómo sabrá el agua del Lago Titicaca?.

Deseo visitar Américar: pasar el día de los muertos en Méjico, visitar ruinas increibles, bañarme en cálidas aguas y tomar frutas exóticas...

Vuelvo a entreabrir los ojos, parece que el sol calienta ya demasiado...

Me espera una agradable ducha y luego una deliciosa comida....hay momentos en la vida, que no tienen precio...

¿Alguien se apunta?

La banda sonora siempre es importante: Gayatri  Mantra.