lunes, 29 de agosto de 2011

VUELTA AL COLE

Bueeenooo, después de casi un mes, aquí estoy de nuevo.
Tras las vacaciones de verano y haber superado el choque con la cruel realidad, ya estoy preparada para la vuelta al cole.
Para mí Septiembre siempre es la vuelta al cole, aunque tenga 35 años.Es un periodo para volver a empezar tras haber cargado las pilas viviendo un intenso verano.
Y así , para no perder la tradición , el comienzo del curso se inicia con la esperada redacción : ¿Qué has hecho este verano?...Pues seño...yo ....

He aprovechado para cumplir uno de mis sueños: Hacer el Camino de Santiago.
Ha sido una de las experiencias más maravillosas de mi vida.

La gente te comenta, "dicen que te cambia la vida, ¿es verdad?".Pues sí, es verdad. Aprendes a ver la vida de otra forma, a valorar lo que realmente importa, a conocerte en cuerpo y alma, y sirve para renovarte. Santiago me hizo un regalo que nadie me había hecho nunca , un regalo que desde entonces recuerdo cada día... Volveré , y espero que sea haciendo el Camino desde Roncesvalles.

En esta foto ya había dejado de llorar como una Magdalena...


Para poder hacer El Camino tuvimos que apurar las vacas al máximo: Volvíamos a las 3 de la mañana y entrábamos a trabajar ...a las 3 de la tarde...Menos mal que ese sábado teníamos libre y nos esperaba....

¡¡¡¡¡"EL BALNEARIO"!!!!

¡¡Dios mío!! ¡¡Qué cosa tan maravillosa!!!

Balneario de Manzanera, Teruel.Con razón se llama "El Paraíso". Diariamente, trago de agua con propiedades medicinales (es la única excusa por la que te lo puedes beber), y baño de chorros termales, masaje de espalda, tratamiento para piernas cansadas, tratamiento de vapor, ¡¡CHOCOLATERAPIA"!!... Todo en un ambiente maravilloso, rodeado de una alameda, a la que acudíamos a leer , tomar un té y ver correr a las ardillas escuchando el murmullo del agua...

El servicio estupendo y muy agradable. Volveré en invierno. Con nieve debe ser la repanocha...

Por estas escaleras bajábamos a las 8.30 de la mañana a echarnos "el trago" ...Puag!

Pues sí profe, este es un resumen muy resumido de lo que han sido mis vacas, y creo que lo voy a dejar ya aquí. Que mañana tengo que madrugar para ir al gimnasio antes de ir a trabajar... (Lo de gim es importante....le prometí a Santi que me cuidaría....)






miércoles, 3 de agosto de 2011

COMO PONER UNA VIEIRA EN TU MOCHILA

INGREDIENTES NECESARIOS:

-Una concha de vieira
-Una mochila
-Una navaja multiusos
-Una perra o perro  (un can) .(Elemento no esencial.)
-Hilo de nylon , (del estilo del de caña de pescar)
-Un mechero

En primer lugar tomamos una concha de vieira.A ser posible sin restos de bechamel. En mi caso , como era regalada,(a caballo regalado , no le mires el dentado...) , la he limpiado y he procedido a buscar dónde hacer los agujeros.

La zona escogida es la prolongación plana que tiene en su base la concha. En este caso , hemos optado por hacer un agujero en cada extremo .Con esto esperamos tener mayor facilidad para sujetarla y, a su vez, dotarla de mayor estabilidad.

Para hacer los agujeros , utilizaremos el punzón que viene incorporado en una de las funciones multiusos de la navaja . En mi caso, como además era el estreno más o menos oficial, le dedico unos minutos para conocerla mejor.
Una vez que hemos abierto todas las "chismas " que tiene la navaja, la acariciamos, apreciamos la suavidad de su textura y color, y hacemos un rato el macarra, procedemos a seleccionar la opción puntero.

Con la punta del puntero, comenzamos a hacer una pequeña escisión en una de las zonas seleccionadas anteriormente en la concha de la vieira.El movimiento ha de ser repetitivo, y aunque pensemos que sólo vamos a estropear la punta, y que no vamos a conseguir nada, no hay que desesperar: funciona.

En este momento es en el que el can , que no es elemento obligatorio, nos chupa los pies y las pantorrillas, sin que en ningún caso lo hayamos solicitado. La mejor opción , es prometer al animal ,que en cuanto se termine con tan ardua tarea, se le sacará a pasear.Igualmente lo mejor es cumplir la promesa ya que si no se hace , posiblemente lloriquee hasta el día del juicio final.

Una vez que hemos hecho ambos agujeros, soplamos para contemplar que nuestro minucioso trabajo ha sido un éxito y podemos proclamar a los cuatro vientos que somos capaces de sobrevivir en medio de una selva con tan sólo una navaja suiza.

El siguiente paso es sujetar la vieira a la mochila.
Para ello utilizaremos un hilo altamente resistente.Si como en mi caso, dispones de un costurero familiar en el que ya lo has localizado anteriormente, mucho mejor. Siempre que se pueda evitar, es preferible no abrir por error la caja de los botones y desparramarlos por el fondo del costurero.

Tomamos  aproximadamente medio metro de hilo y lo pasamos por los agujeros de la vieira para sujetarla firmemente. La hacemos pasar por los enganches que creamos más oportunos de la mochila.
Es importante que se vea y no quede camuflada, ya que este elemento nos permitirá identificarnos como peregrinos, y no como "perro-flautas".
Finalmente quemamos con un mechero el nudo con el que hayamos atado la vieira...y fin.

Podemos comprobar que el resultado es soberbio, maravilloso, excepcional.

Observen la grandiosidad del resultado....